Superliga Valle – Litoral
Un Sueño Que Nace del Corazón de Casablanca
2025
Superliga Valle
Litoral Casablanca
Nace desde una profunda necesidad: seguir incentivando el deporte en nuestra querida comuna de Casablanca. No es solo una liga de fútbol. Es un sueño colectivo que se construye con esfuerzo, pasión y esperanza. Es la respuesta a cientos de niñas y niños que anhelan un espacio donde puedan crecer, competir sanamente y soñar en grande.
Este proyecto nace con el firme propósito de posicionar a Casablanca como una ciudad que vive y respira deporte. Una ciudad que cree en el poder transformador de la actividad física, en los valores que se cultivan en cada entrenamiento y en el impacto que tiene el deporte como herramienta de inserción social. Porque cuando un niño entra a una cancha, también entra a un mundo de respeto, disciplina, trabajo en equipo y superación.
La Superliga no solo reúne a clubes y escuelas deportivas. Reúne a familias, profesores, vecinos y autoridades que comparten un mismo objetivo: formar personas, no solo deportistas. Y en ese camino, hacer de Casablanca una comuna ejemplo, donde el deporte sea parte del alma de su gente.
Hoy damos el puntapié inicial a algo más grande que una competencia. Damos inicio a una comunidad que cree, que sueña y que trabaja por un futuro más sano, más justo y más unido.
Misión
La Superliga Valle-Litoral nace del corazón de Casablanca con un propósito profundo: abrir espacios donde el deporte se convierta en un puente hacia los sueños, una escuela de vida y un refugio para crecer con valores. Nuestra misión es formar, a través del fútbol, no solo deportistas, sino personas íntegras, felices y comprometidas con su comunidad. Queremos que cada niño y niña que entre a la cancha sienta que puede llegar lejos, que no está solo, y que el deporte es una herramienta poderosa para cambiar su vida y su entorno
Visión
Soñamos con una Casablanca donde el deporte sea parte del alma de la comuna. Una ciudad que se reconozca por formar personas con valores, donde la pelota ruede no solo para competir, sino para unir, para enseñar, para sanar. La Superliga Valle-Litoral quiere ser mucho más que una competencia: quiere ser un símbolo de esperanza, un motor de transformación social y un ejemplo para otras comunas de que cuando se trabaja con amor, comunidad y propósito, se puede cambiar el mundo, una jugada a la vez.